Esta es una pregunta teatral que en el mejor de los
casos conduce a una respuesta algo deshilachada. Como el feminismo, el
postfeminismo no es monolítico ni en su discurso ni en su práctica,
ni puede ser construido como un modelo que pueda incluso esperar un consenso
mayoritario entre aquellas y aquellos que se identifican con la categoría
en términos generales. Sin embargo, algunas de las primeras variedades
de postfeminismo pueden ser libremente identificadas:
1. Postfeministas Retrógradas. Esta
acotación se compone generalmente de las apologistas de la identidad
y el rol(es) femenino(s) tradicionales, y está marcado por el deseo
de regresar al discurso del género y la práctica con límites
claros y rígidos que no deben ser transgredidos.
2. Postfeministas monotemáticas.
Esta agrupación generalmente tiene una gran simpatía hacia
buena parte de la crítica feminista, pero cree que la "corriente"
feminista ha seguido un camino incorrecto en una cuestión de enorme
significación (La particular problemática de la cuestión
determinada puede variar grandemente). Por ejemplo, aquellas que se identifican
con la categoría de "sexo positivo" son representantes de esta tendencia.
Aquí se cree que el feminismo, en su celo para parar la violencia
contra las mujeres (particularmente la violación y el abuso sexual),
se ha rendido a las políticas de afirmación de la liberación
y de las comisiones personales, y ha insistido en volver a la mediación
del estado de seguridad (es decir, el patriarcado). Por ejemplo, las leyes
civiles contra el acoso sexual (percibidas a menudo como medios de mejorar
el control de la expresión sexual de la clase media, y de perseguir
a mujeres y a hombres que no son corteses) y las leyes de la contra-pornografía
defendidas por algunos grupos feministas se ven como a favor del no-sexo
y autorizando el patriarcado. Algunas feministas, que no desean ser asociados
a tales posiciones, se han reidentificado como postfeministas.
3. Postfeministas Heroicas. Este campo se
refiere sobre todo a la cuestión del tema feminista. Sus militantes
alzan su voz para expresar dos críticas principalmente, aunque los
aspectos determinados de énfasis tienden a variar enormemente. La
primera está preocupada por definir el tema feminista. La creencia
hasta el momento, es que todas las definiciones del feminismo han excluido
a algunas colectividades de la poblaciones de mujeres. Un ejemplo fácil
de los tempranos años 70, es que la definición de tema feminista
tendió a implicar a las blancas heteroxesuales, excluyendo a las
minorías étnicas y las lesbianas. (Este problema ha sido
no obstante solucionado con la satisfacción de los grupos minoritarios).
La segunda crítica es que el género no se puede separar completamente
de otras variables sociales, tales como la raza/etnicidad o la clase. Para
hablar sobre una preocupación social como la "cuestión femenina"
se considera ingenua si no dañina la reducción que tiende
hacia la universalización del tema que el feminismo demanda mantener.
Por lo tanto, este grupo se implica en idear estrategias de acción
social de defensa que no dependan de la preexistencia de una identidad
localizada.
4. Utópicas Cyberfems. Esta categoría
es quizás una escisión de las postfeministas heroicas. Este
grupo cree que el aparato (es decir, la Red) y el espacio social (es decir,
el Cyberspace) necesario para realizar la libertad de la cuestión
social ha sido ya creado, y que está dispuesto para que los cybernautas
identificados-femeninos exploten esta nueva posibilidad. La incorpórea
mente femenina, libre de la sexista inscripción en su cuerpo, puede
ahora realizarse completamente y ser representada en el medio virtual tecnológico.
Las cyberfems son enemigas juradas de todo aquél que intente
importar historias anacrónicas del género humano en el Cibersespacio,
y se burlan de aquellos que traigan en sus manos asuntos sobre la posibilidad
de la violación virtual (es decir, del feminista estado de seguridad).
Resulta innecesario decir que muchos críticos culturales las encuentran
un tanto optimistas, y levemente miopes. Sin embargo, lo que pueden carecer
en sofisticación teórica, se compensan en su arrojada y perspicaz
práctica.
[Trad. Ana Martínez-Collado]
Critical Arts Ensemble es un colectivo de cinco
artistas de varias especializaciones dedicadas a explorar las intersecciones
entre el arte, la tecnología, las políticas radicales, y
la teoría crítica. Los libros de CAE incluyen, The
Electronic Disturbance and Electronic Civil Disobedience. La
home page de CAE está situada en http://mailer.fsu.edu/~sbarnes |